SNL: No hay quinto malo

No hace falta ser un fan completista de Saturday Night Live para saber que, a día de hoy, no hay mejor host para el show que Justin Timberlake. El chico para todo [1] demuestra en cada aparición por qué representa la figura del presentador perfecto. Su dominio de todas las artes escénicas, sus tablas y su predisposición para hacer el ridículo convierten cada aparición suya en un must see. Evidentemente tanta loa representa un arma de doble filo ya que las altas expectativas suelen jugar siempre en contra. Y más cuando entras en el honorable club de los cinco. The Five Timers Club es como se conoce al grupo de gente que ha presentado o aparecido como invitado musical en SNL al menos cinco veces. Una ilustre lista de artistas fetiche del programa que debe su creación y nombre al sketch que abrió el programa en el que Tom Hanks fue el presentador por, venga esta es fácil, quinta vez.




Era diciembre de 1990 y un jovencísimo Conan O'Brien, que por aquel entonces era guionista del programa, le daba la bienvenida a Hanks al club de los cinco. Dentro le esperaban Steve Martin (15), Elliott Gould (6) y Paul Simon (12) [2], ilustres miembros del club, y no faltaron otras apariciones como la de Jon Lovitz o Ralph Nader.  Como se habrán dado cuenta, el monologo inicial de Timberlake el pasado sábado no es más que un homenaje a este mítico sketch, que no solo repetía estructura si no invitados especiales. Repiten Martin, Simon y Hanks (8) y les acompañan otros miembros del club como Chevy Chase (8) [3], Candice Bergen (5) o Alec Baldwin (16) [4]. Se hace referencia a otros miembros como Drew Barrymore (6) [5] o John Goodman (12) [6] y hacen aparición especial otros dos sospechosos habituales como Dan Aykroyd y Martin Short, propiciando este último una reunión de ¡Three Amigos! con Chase y Martin.

Era evidente, tras esta muestra de nostalgia, que no nos encontrábamos ante una edición normal del programa y que Lorne Michaels había quemado todas las naves para hacer de la quinta aparición de Justin Timberlake no solo un gran programa, si no una recopilación de sketches y personajes recurrentes y clásicos potenciados por la temprana vuelta de Andy Samberg, figura principal dentro del éxito de Timberlake en SNL. Así pues, comenzamos con un sketch génerico de programa de citas en el donde un cada vez más sensacional Bobby Moynihan se enfrentaba por un lado al duo "Dick in a Box" formado por Samberg y Timberlake y, por el otro, a los míticos hermanos Festrunk de Martin y Aykroyd, los two wild and crazy guys.




Le siguió otro clásico de Timberlake, el "bring it on down to somethingville", esta vez vestido de tofu y versionando canciones sobre el vegetarianismo con mención forzada, ¡hola internet!, al Harlem Shake y ante un Moyniham de nuevo que clava como nadie el papel de hombre humillado. Y tras el típico anuncio falso, esta vez sobre anillos anticonceptivos de pedrería, llegaba con el Weekend Update otro esperadísimo regreso, el de Stefon, el corresponsal en Nueva York de excéntricos gustos interpretado magistralmente por Bill Hader y del que cuesta creer, viendo los referentes, que dentro de poco no vaya a protagonizar algún que otro spin-off en forma de película. Después del Update, llegó la hora para el único sketch original del programa, y posiblemente el más fallido, The Tales of Sober Caligula, y la vuelta de otros dos hits, Main Justice y las chicas de Swarovski, con unas emormes Vanessa Bayer y Cecily Strong. Entre medias, doble actuación musical por todo lo alto de Justin, con aparición sorpresa de un Jay Z rendido a la causa y falso trailer de comedia romántica, esa en la que se está especializado Timberlake, en el que se señala con mucho tino todos los tics del género.

Saturday Night Live no entra en esta vorágine todos los días pero sin duda, cuando lo hace, suele elegir bien el momento y los protagonistas. Y hoy en día no hay mejor protagonista que un Justin Timberlake al que si las cosas le van bien no será la última vez que veamos por SNL. Ni la penúltima. Que tiemblen Steve Martin y Alec Baldwin.

[1] O para casi todo, ya que no sabe tocar el banjo
[2] Tres como host, una como host e invitado musical en el mismo programa, y ocho como invitado musical.
[3] Que no solo es el primer alumno de SNL en volver a presentar un programa, si no que es el ex que más veces lo ha hecho. El cómo ha llegado a tal cifra si es de dominio público que nadie le soporta es algo que solo tiene sentido teniendo en cuenta la enormidad e importancia de la figura de Chase.
[4] Alec Baldwin tiene el record de de aparecer como presentador del programa. En el sktech que continua con la tradición de este Five Timers Club, Platinum Lounge, le vemos a él y Steve Martin en una sala en la que solo pueden entrar aquellos que hayan llegado a la cifra de doce apariciones.
[5] La presentadora más joven en aparecer en SNL, con solo siete años.
[6] Que presento al menos un programa durante once temporadas consecutivas.