Torchwood: Children of Earth
Ya se ha emitido la atípica tercera temporada de Torchwood, y el experimento le ha salido a la BBC bastante bien. Y me da la sensación de que se acaba de producir una evolución y un punto de inflexión en esta serie bastante importante. ¿Qué ha supuesto todo esto? La respuesta (y una buena cantidad de spoilers), a continuación.
No es ningún secreto mi admiración por Doctor Who, la serie de la que Torchwood es spin-off. Me fascina hasta cotas insospechadas, por lo que como mal fan procuro devorar cualquier cosa sobre ella. Y así comenzó mi aventura con Torchwood y las aventuras del Capitán Jack Harness.
Vendida siempre como "la Doctor Who para adultos" (calificativo que no hace otra cosa que perjudicar a la serie) Torchwood nunca despegó de verdad y parecía siempre en continua evolución. Siendo críticos, la serie cuenta con una temporada y media bastante prescindible (que no mala) mucha irregularidad en sus historias, guiones cogidos por pinzas y bastantes personajes que andan por ahí pero no sabes muy bien por qué.
Os pido por favor a todos los fans de la serie que no os tireis a mis espaldas aún, porque todavía no he dicho que Torchwood me gusta. Y me gusta por la sobriedad que le imprime Russell T. Davies (algo que no suele hacer en Doctor Who, por cierto, con esos finales de temporada de artificio). Hay una cosa muy importante, que se ha mostrado durante toda la serie y cuyo punto y final hemos podido ver en Children of Earth. Al igual que las compañeras del Doctor, los empleados de Torchwood son prescindibles. Poseen un trabajo privilegiado no exento de riesgos. Trabajar protegiendo la Tierra de los alienígenas y prepararla para el futuro te da todas las papeletas para sufrir una muerte horrible. Y como Torchwood pretende ser más meláncolica, seria y adulta que Doctor Who (cosa que creo que no consigue) esto último significa que pocas veces vamos a ver un final feliz para sus protagonistas.
Os pido por favor a todos los fans de la serie que no os tireis a mis espaldas aún, porque todavía no he dicho que Torchwood me gusta. Y me gusta por la sobriedad que le imprime Russell T. Davies (algo que no suele hacer en Doctor Who, por cierto, con esos finales de temporada de artificio). Hay una cosa muy importante, que se ha mostrado durante toda la serie y cuyo punto y final hemos podido ver en Children of Earth. Al igual que las compañeras del Doctor, los empleados de Torchwood son prescindibles. Poseen un trabajo privilegiado no exento de riesgos. Trabajar protegiendo la Tierra de los alienígenas y prepararla para el futuro te da todas las papeletas para sufrir una muerte horrible. Y como Torchwood pretende ser más meláncolica, seria y adulta que Doctor Who (cosa que creo que no consigue) esto último significa que pocas veces vamos a ver un final feliz para sus protagonistas.
Pero vamos a lo que interesa. El experimento de la BBC y Russell T. Davies de hacer de la tercera temporada una miniserie de cinco episodios de una hora y emitirla en el mejor horario posible, les ha funcionado. Por lo menos en lo que audiencia y ruido mediático se refiere (ya se da por hecha una cuarta temporada). Pero como ya he dicho al principio, también les ha servido para que la serie evolucione notablemente en cuanto a calidad se refiere. Torchwood se ha hecho mayor y todo esta dispuesto para continuar la serie por estos nuevos derroteros.
Así que vayamos por partes. ¿Cuáles son los puntos en los que se ha acertado y que deberían convertirse en marca de la casa?
Dejar atrás la coralidad de la serie: Adoro las series corales, pero en Torchwood no funcionaba. Y no funcionaba porque las historias de los personajes no daban pie a ello. Si el protagonismo de todo cae siempre en Jack y sus relaciones con las personas que le rodean, vamos a limitar el número de estas. En Children of Earth hemos tenido un Torchwood compuesto por tres personajes que han tenido más tiempo para desarrollar sus historias y, lo más importante, de hacer que sean más interesantes.
Apostar por un arco argumental único: Aunque esto signifique abandonar la serialidad de la serie. Creo que todo el mundo ha quedado bastante contento el experimento. ¿Por qué no tener dos miniseries al año de Torchwood, cada una con una historia que contar? Así de paso, nos ahorramos episodios intrascendentes con "el bicho de la semana".
Explotar las circunstancias de Jark Harness: Más si cabe aún. Porque funciona e interesa. Un ser inmortal, que no le tiene miedo a nada pero que trae la desgracia al que le rodea. Muy parecido al personaje del Doctor, por cierto. Pero si de verdad Torchwood pretende ser más seria y adulta, hay que lograr (como hemos visto en esta tercera temporada) llevar estas circunstancias a cotas más altas y trágicas. En cinco días Jack Harness ha perdido a su amor, Ianto, y a su nieto, lo que le ha hecho huir y dejar atrás una Tierra que adora y que tantas veces ha conseguido salvar.
Dejar atrás la coralidad de la serie: Adoro las series corales, pero en Torchwood no funcionaba. Y no funcionaba porque las historias de los personajes no daban pie a ello. Si el protagonismo de todo cae siempre en Jack y sus relaciones con las personas que le rodean, vamos a limitar el número de estas. En Children of Earth hemos tenido un Torchwood compuesto por tres personajes que han tenido más tiempo para desarrollar sus historias y, lo más importante, de hacer que sean más interesantes.
Apostar por un arco argumental único: Aunque esto signifique abandonar la serialidad de la serie. Creo que todo el mundo ha quedado bastante contento el experimento. ¿Por qué no tener dos miniseries al año de Torchwood, cada una con una historia que contar? Así de paso, nos ahorramos episodios intrascendentes con "el bicho de la semana".
Explotar las circunstancias de Jark Harness: Más si cabe aún. Porque funciona e interesa. Un ser inmortal, que no le tiene miedo a nada pero que trae la desgracia al que le rodea. Muy parecido al personaje del Doctor, por cierto. Pero si de verdad Torchwood pretende ser más seria y adulta, hay que lograr (como hemos visto en esta tercera temporada) llevar estas circunstancias a cotas más altas y trágicas. En cinco días Jack Harness ha perdido a su amor, Ianto, y a su nieto, lo que le ha hecho huir y dejar atrás una Tierra que adora y que tantas veces ha conseguido salvar.
Por ahora nos toca esperar a que la BBC confirme una cuarta temporada y ver si todo este camino que ha andado Torchwood se mantiene o, por el contrario, se vuelve a la vieja fórmula. Pero pase lo que pase, Children of Earth será siempre esa pequeña maravilla que nos regalaron en Verano de 2009.