Poli Malo, Poli Bueno: The Walking Dead

Que desfachatez me parece que tengamos que venir a trabajar un lunes por un tema que no merece ninguna discusión. ¡The Walking Dead es la serie dela año! Hasta un necio podría verlo.... ¿eh Poli Malo?. Por fin se le da seriedad y empaque a un género necesitado de ello y se le acompaña con un desarrollo de personajes ejemplar. The Walking Dead es el The Dark Knight de las historias de zombies, ya nada volverá a ser igual.

Por una vez estamos de acuerdo en algo, pero me temo que no en el tema en cuestión. ¡Qué asco currar un lunes! Pero bueno, a lo que íbamos, The Walking Dead. Es curioso como sin necesidad alguna de decir casi nada sobre la serie ya empieza a meter la pata hasta el fondo. ¿Seriedad a un género necesitado de ello? ¡Valiente meapilas se pone usted hoy, Poli Bueno! Pero antes de seguir menospreciando a un género que ya a demostrado que no conoce, dígame por favor, si por "seriedad" se refiere a esos momentos moñas que gritan a los cuatro vientos, ¡miren señoras, que somos los chicos buenos!

Como casi siempre, "amigo", se sale por la tangente cuando no tiene nada coherente que argumentar y empieza a tirar de topicazos. Pues bien, no seré yo quien le siga el juego esta vez. Porque si de verdad supiera tanto como dice, sabría que una de las características de The Walking Dead, cómic, es la degradación y animalización de sus personajes. Así que esos momentos moños que tanto parecen importarle, no son más que el ejemplo de la humanidad que se conserva pero que, a medida que pasa el tiempo en un mundo incivilizado y sin normas, se va perdiendo.

¿Cómic? ¡Pero quién está hablando de cómics? La última vez que leí este blog - hace mucho tiempo, gracias a Dios - creo que se hablaba de televisión, ¿no? Así que déjese de futuribles basándose en lo que haya leído en cuatro viñetas, porque en escasos tres episodios ya se ha dejado bastante claro que The Walking Dead se está esforzando por no seguir exactamente el camino de su obra original, por lo que se puede ahorrar todo a eso por lo menos hasta cuando suceda, ¡si es que sucede! Pero para que vea que no solo estoy en contra su postura, si no contra algunas de las pifias de esta serie... ¿no se emociona mucho cuando todo lo visto no es más que una colección de situaciones y comportamientos mil veces visto en otras cuantas producciones de este tipo?

Sí, ¿y? The Walking Dead utiliza la invasión zombie como punto de partida, y poco margen para la originalidad se puede sacar de ahí, pero - y a riesgo de volverme repetitivo y usted me lo recrimine - sigo manteniendo que la maravillosidad de esta historia está en la evolución de unos personajes a partir de las situaciones clásicas del cine de terror, zombies en este caso. Eso y la sensación de tensión continua que nunca  te deja saber que puede pasar al momento siguiente, más o menos lo que pasa cuando uno se pone a discutir con usted.

¡Hombre! Pues por una vez que voy a tener la última palabra por supuesto que se lo voy a recriminar. ¡Pesado, deja de repetirte! Como parece que está en sus trece voy acabar esta intervención como si fuera un episodio de The Walking Dead. Porque tenemos que recordar que antes de Polis Bueno y Polis Malos, todos somos personas y que, por ello, merecemos que nuestras opiniones sean respetadas por igual, para no convertirnos en animales sedientos de mofa e insulto. Y mientras le dejo con esa reflexión, permítame que me aleje de plano mientras suena la versión cañera de alguna canción de culto y... ¡créditos finales! ¡A positivar!

Las sirenas atraen a los no muertos, las municiones escasean y no queda tiempo... ¿Poli Bueno o Poli Malo?