IFC monopoliza el absurdo
Desde hace un par de años, un pequeño canal de cable llamado IFC (Independent Film Channel), se está atreviendo a hacer algo distinto para mantenerse a flote en el competitivo mundo de la televisión estadounidense. En lugar de competir con los "peces gordos" por conquistar al público mayoritario, lo que hacen es apostar fuerte por una audiencia nicho, en particular los fans de la comedia. Pero no cualquier tipo de comedia, basta echarle un vistazo a la parrilla para identificar rápidamente su público objetivo [1]: joyas de culto como Arrested Development o Malcolm in the Middle se mezclan con producciones propias de gran calidad como The Increasingly Poor Decisions of Todd Margaret (protagonizada por David Cross, el analrapist más famoso de California) o Portlandia. Tras el (relativo) éxito y la consolidación de ésta última, las buenas gentes de IFC se dieron cuenta de que el modelo funciona, de que hay gente interesada en la risotada y en no ser tratado como un idiota a la vez. Lo que nos lleva a sus dos proyectos más recientes...
Por otro lado tenemos a Bunk, un falso concurso en el que tres cómicos [3] compiten en una serie de pruebas ridículas y sin sentido. Para mi el gran atractivo del programa es el gran componente de improvisación por parte de los concursantes, que se las tienen que ingeniar para responder de forma graciosa a pruebas como "Avergüenza a ese perrito", "Supera esta mentira" o "Dile la verdad a este niño de 5 años". La parte guionizada también es genial, todas las intervenciones del presentador, el cómico Kurt Braunholer, son hilarantes y las distintas pruebas son muy originales y dan bastante juego a los concursantes. Para que os hagais una idea, Bunk sería una mezcla entre el mítico programa Whose line is it anyway? (o su versión española, Los Irrepetibles de la Sexta [4]) y el legendario Smonka! (curiosamente también de autoría chanante).
Espero haber llamado la atención aunque sea de algunos lectores hacia un canal que se está buscando la vida de una forma original, aprovechando talento más allá de lo mainstream y dando libertad creativa a los creadores. Todo esto con un tono en común que si te gusta una de sus series, es probable que te gusten las demás. Desde luego le prestaremos atención a los futuros proyectos de esta noble cadena, entre los que se encuentran una serie de animación y un falso documental basado en la vida del cómico Marc Maron y su (altamente recomendable) podcast What The Fuck with Marc Maron.
[1] Hipsters principalmente.
[2] Mención aparte para el hombre-banda residente Reggie Watts, un cómico sin igual que aporta la música con su particular e inimitable estilo y tiene una gran química con Scott. Servidor es bastante fan de este hombre con afro descomunal, su espectáculo combina música, rap y standup de una forma experimental, improvisada y a veces un tanto confusa. He aquí un ejemplo.
[3] Los cómicos concursantes no son caras demasiado conocidas en la televisión pero si tienen bastante caché en el circuito de stand-up norteamericano. Como función secundaria, Bunk sirve para promocionar a estos nobles señores (y de momento señorita, aunque Kristen Schaal está al caer) que tienen talento de sobra. Si les gusta lo que ven en el concurso y el stand-up de oficio no se pierdan los espéctaculos de Eugene Mirman, Dana Gould o Kumail Nanjiani.
El primero es Comedy Bang! Bang!, un talkshow deconstruído y adaptado del podcast homónimo en el que el presentador, Hot Soccermom Scott Aukerman, entrevista a distintos invitados, generalmente actores cómicos como Jon Hamm, Amy Poehler o Zach Galifianakis. La clave del éxito del podcast (altamente recomendable si controlas el inglés) reside en la improvisación que permite el formato y en la intervención de distintos personajes interpretados por otros cómicos invitados (Paul F. Tompkins es un genio). En la versión televisiva se pierde esa frescura pero se gana en la concentración de puro humor absurdo (piensa en la época dorada de La Hora Chanante) y en las obvias posibilidades que permite el medio visual. Así, el programa mezcla entrevistas que no llevan a ninguna parte con distintos gags (que normalmente aprovechan las habilidades cómicas de los invitados) y sketches, todo guionizado previa ingesta de LSD. Es cierto que para disfrutar de este estilo de humor hay que entrar hasta la cocina, pero una vez dentro, lo que hacen el señor Aukerman y compañía [2] es verdaderamente único.
Por otro lado tenemos a Bunk, un falso concurso en el que tres cómicos [3] compiten en una serie de pruebas ridículas y sin sentido. Para mi el gran atractivo del programa es el gran componente de improvisación por parte de los concursantes, que se las tienen que ingeniar para responder de forma graciosa a pruebas como "Avergüenza a ese perrito", "Supera esta mentira" o "Dile la verdad a este niño de 5 años". La parte guionizada también es genial, todas las intervenciones del presentador, el cómico Kurt Braunholer, son hilarantes y las distintas pruebas son muy originales y dan bastante juego a los concursantes. Para que os hagais una idea, Bunk sería una mezcla entre el mítico programa Whose line is it anyway? (o su versión española, Los Irrepetibles de la Sexta [4]) y el legendario Smonka! (curiosamente también de autoría chanante).
Espero haber llamado la atención aunque sea de algunos lectores hacia un canal que se está buscando la vida de una forma original, aprovechando talento más allá de lo mainstream y dando libertad creativa a los creadores. Todo esto con un tono en común que si te gusta una de sus series, es probable que te gusten las demás. Desde luego le prestaremos atención a los futuros proyectos de esta noble cadena, entre los que se encuentran una serie de animación y un falso documental basado en la vida del cómico Marc Maron y su (altamente recomendable) podcast What The Fuck with Marc Maron.
[1] Hipsters principalmente.
[2] Mención aparte para el hombre-banda residente Reggie Watts, un cómico sin igual que aporta la música con su particular e inimitable estilo y tiene una gran química con Scott. Servidor es bastante fan de este hombre con afro descomunal, su espectáculo combina música, rap y standup de una forma experimental, improvisada y a veces un tanto confusa. He aquí un ejemplo.
[3] Los cómicos concursantes no son caras demasiado conocidas en la televisión pero si tienen bastante caché en el circuito de stand-up norteamericano. Como función secundaria, Bunk sirve para promocionar a estos nobles señores (y de momento señorita, aunque Kristen Schaal está al caer) que tienen talento de sobra. Si les gusta lo que ven en el concurso y el stand-up de oficio no se pierdan los espéctaculos de Eugene Mirman, Dana Gould o Kumail Nanjiani.
[4] Que alguien me explique por qué La Sexta no repite este programa ad infinitum.