An Adventure in Space and Time
Dentro de los innumerables festejos preparados para este fin de semana por la BBC para conmemorar los 50 años de la creación de Doctor Who hay dos piezas que constituyen el epicentro de las celebraciones. Evidentemente el primero es The Day of the Doctor, el episodio especial que se emitirá este sabado 23, en la fecha exacta del aniversario. Y el segundo es este An Adventure in Space and Time, el docudrama escrito por Mark Gattis que recrea la historia de como se concibió la serie y de las personas que fueron responsables de ello.
An Adventure in Space and Time es ante todo una carta de amor de un fan de Doctor Who. Y afortunadamente no solo se queda en una mirada nostálgica si no que se molesta en contar una historia diferente a la de la fundación de una serie. La de un grupo de personas marginadas del sistema imperante de la BBC de aquella época que lograron sacar adelante una serie por la que nadie daba un penique. Pero ante todo cuenta la historia de William Hartnell (interpretado por un imperial David Bradley) un actor de segunda que ve como en los últimos suspiros de su carrera le ofrecen la oportunidad de su vida, una oportunidad a la que se aferró hasta que pudo. Hoy en día damos por hecho la capacidad de la serie de reinventarse y la del espectador de estar preparado para el cambio continuo. Pero en 1963 ni el más loco de todo Londres creería que Doctor Who alcanzaría la importancia que acabó alcanzando. Y desde luego, nadie podría imaginarse que otra persona que no fuera Hartnell no fuera el Dr. Who.
Por ello, repito, el gran acierto de An Adventure... es relegar los elementos festivos a un segundo plano a favor de un relato. Esta vuelta al pasado a la televisión de los sesenta, que a veces parece una continuación espiritual de la ya desaparecida The Hour, pone mucho énfasis en presentar al equipo creativo de la serie y sus circunstancias: Sidney Newman (Brian Cox), un canadiense que consiguió hacerse con el puesto de jefe de drama de la BBC y creador de Doctor Who, Verity Lambert (Jessica Raine), su joven ayudante y primera productora ejecutiva de la serie y Waris Hussein (Sacha Dhawan) otro joven empleado de la cadena de procedencia india que se convertiría en su primer director. En esta parte de la historia Lambert es la protagonista absoluta. Un chica judía que por una parte tiene que luchar contra el prejuicio de ser una mujer joven en un mundo dominado por hombres y que por la otra tiene que enfrentarse a las adversidades e impedimentos de producir una serie infantil de ciencia ficción semanal de bajo presupuesto a la que nadie quería poner especial atención en sus comienzos.
El triunfo de Mark Gatiss [1] es conseguir insertar una buena cantidad de homenajes y guiños dentro de una historia consistente creando así una hora y media disfrutable tanto para el que no sea conocedor de los primeros tiempos de la serie como por aquel que sea un fan absoluto. La recreación de momentos míticos de Doctro Who con una exactitud memorable y los cameos de muchos de los actores que salen en la propia historia como Carol Ann Ford, William Russell o Anekke Wills no son más que una muestra [2] del espíritu nostálgico con los que Gatiss impregna su relato.
An Adventure in Space and Time es una mirada nostálgica a un pasado que en tiempo no parece tan lejano y que narra las dificultades para conseguir fundar la que a la larga se convertiría en la serie de ciencia ficción más longeva de la televisión. Un repaso íntimo a las figuras claves en la creación de un mito que, por entonces, solo intentaban hacer lo mejor posible su trabajo sin tener la menor idea de lo acabarían logrando. Un maravilloso viaje al pasado que cumple su merecido tributo con la historia. En definitiva, el producto perfecto para conmemorar medio siglo de historia.
[1] Mirando su currículo pocas personas parecerían más adecuadas que Gatiss para llevar a cabo este proyecto. Guionista de algunos de los spinoffs no oficiales de la serie en los noventa, redactor de Doctor Who Magazine, escritor de varios libros de la serie, guionista de nuevo de la serie moderna y mano derecha de Steven Moffat durante su mandato como productor de la serie. Si una cosa se puede decir de Mark Gatiss es que es un whovian con honores y que nunca deja pasar la oportunidad de demostrarlo.
[2] Aquí tenéis una lista con todos esos guiños a los fans que se dan durante la película.